En la universidad americana de Yale, hace ya unos años, Bill Gates pronunció una conferencia dirigida a estudiantes y padres de familia.
En el transcurso de la misma explicó once reglas que merece la pena leer un par de veces. Este es un extracto de las mismas:
1.- La vida no es justa, acostúmbrate a ello.
2.- Al mundo no le importará tu autoestima. El mundo espera que logres algo, independientemente de que te sientas bien o no contigo mismo.
3.- No ganarás 5.000 euros mensuales justo después de haber salido de la universidad o el colegio, ni serás un vicepresidente hasta que con tu esfuerzo te lo hayas ganado.
4.- Si piensas que tu profesor es duro, espera a tener un jefe. Ese si que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida.
Dedicarte a preparar hamburguesas no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo, lo llamaban oportunidad.
Si metes la pata, no es culpa de tus padres. Así que no te lamentes por tus errores, aprende de ellos.
Antes que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son ahora. Ellos empezaron a serlo para pagar tus cuentas, limpiar tu ropa y escucharte hablar acerca de la nueva onda en la que estabas. Así que, antes de emprender tu lucha por las selvas vírgenes contaminadas por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación.
En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre ganadores y perdedores pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años lectivos y te dan las oportunidades que necesites para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Eso no tiene ninguna semejanza con la vida real.
La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones de verano largas en lugares lejanos y muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a ti mismo. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.
La televisión no es la vida diaria. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que salir del café de la película para irse a trabajar.
Sé amable con los “nerds” (los más aplicados de la clase, los empollones). Existen muchas probabilidades que termines trabajando para uno de ellos.
Palabra de Bill Gates.
En el transcurso de la misma explicó once reglas que merece la pena leer un par de veces. Este es un extracto de las mismas:
1.- La vida no es justa, acostúmbrate a ello.
2.- Al mundo no le importará tu autoestima. El mundo espera que logres algo, independientemente de que te sientas bien o no contigo mismo.
3.- No ganarás 5.000 euros mensuales justo después de haber salido de la universidad o el colegio, ni serás un vicepresidente hasta que con tu esfuerzo te lo hayas ganado.
4.- Si piensas que tu profesor es duro, espera a tener un jefe. Ese si que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida.
Dedicarte a preparar hamburguesas no te quita dignidad. Tus abuelos tenían una palabra diferente para describirlo, lo llamaban oportunidad.
Si metes la pata, no es culpa de tus padres. Así que no te lamentes por tus errores, aprende de ellos.
Antes que nacieras, tus padres no eran tan aburridos como son ahora. Ellos empezaron a serlo para pagar tus cuentas, limpiar tu ropa y escucharte hablar acerca de la nueva onda en la que estabas. Así que, antes de emprender tu lucha por las selvas vírgenes contaminadas por la generación de tus padres, inicia el camino limpiando las cosas de tu propia vida, empezando por tu habitación.
En la escuela puede haberse eliminado la diferencia entre ganadores y perdedores pero en la vida real no. En algunas escuelas ya no se pierden años lectivos y te dan las oportunidades que necesites para encontrar la respuesta correcta en tus exámenes y para que tus tareas sean cada vez más fáciles. Eso no tiene ninguna semejanza con la vida real.
La vida no se divide en semestres. No tendrás vacaciones de verano largas en lugares lejanos y muy pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a ti mismo. Todo esto tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.
La televisión no es la vida diaria. En la vida cotidiana, la gente de verdad tiene que salir del café de la película para irse a trabajar.
Sé amable con los “nerds” (los más aplicados de la clase, los empollones). Existen muchas probabilidades que termines trabajando para uno de ellos.
Palabra de Bill Gates.
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